Pan y circo, mientras vamos al desastre.

 Todos conocemos el origen latino (Roma) de la expresión panem et circenses. El gobierno de turno ofrece estímulos y ayudas al pueblo mientras le muestra el espectáculo en los modernos medios de comunicación, para distraer la atención de la plebe, de los verdaderos problemas que asolan el imperio.

Empecemos por Putin y su disfrazada intención de recuperar el imperio sovíético, cuando en realidad quiere acabar con la hegemonía del dólar. La preparada invasión de Ucrania, probablemente acabe en un armisticio, con la declaración oficial de la no inclusión de Ucrania en la Otan y la independencia de la región del Donbass, a cambio de la retirada rusa de los territorios ucranianos.

Primero, como debe ser, deplorar la actitud y los medios de Putin para conseguir su objetivo. Las guerras solo traen destrucción y pérdidas en todos los sentidos. El pueblo de Ucrania no tiene ninguna culpa de estar mal situado geográficamente. Unos mueren por el color de su piel o por sus creencias, pero morir por la situación geográfica tampoco es algo que no hubiera ocurrido antes. 

Pero Occidente no está libre de culpa. La OTAN hace tiempo que debió desaparecer. Después de la desintegración de la Unión Soviética, no tenía sentido su permanencia. Ampliar el marco de actuación a países limítrofes con Rusia, no podía mas que exacerbar los sentimientos dormidos del pueblo ruso. Y llegar hasta las mismas fronteras de Rusia, con armamento militar es como si México se llenara de aviones rusos en una agrupación del antiguo pacto de Varsovia. Seguro que EE.UU, aceptaría de buen grado esta posibilidad.

Una vez introducida la campaña militar y situadas ambas posiciones paso a describir el pan y circo.

La situación económica mundial era (antes del conflicto) desastrosa.

Como primera piedra de toque , la inflación está fuera de control. En España tenemos un IPP (índice de precios al productor) del 35,7%, una cantidad más cercana a la hiperinflación que otra cosa. Hoy hemos conocido el IPC previo de Febrero y advierte de una subida hasta el 7,4%. Un desastre.

Las deudas no dejan de crecer, las cadenas de suministro siguen rotas, la sequía amenaza las cosechas y los precios están fuera de control,  mientras los salarios y las pensiones crecen por debajo del 2%, empobreciendo a la población.

El petróleo y los inventarios son otro motivo de preocupación.

Del informe CORES, podemos comprobar la velocidad de caída de los inventarios de petróleo. Los inventarios de productos petrolíferos pasan de casi 19.000 toneladas en Abril de 2020 a poco más de 14.000 toneladas a finales de Diciembre 2021.

Es decir, la caída en los inventarios es explosiva y en medio de una complicada situación, elegimos suicidarnos. La aplicación de las sanciones del sistema Swift a Rusia, tiene dos vertientes. Ahoga el sistema financiero de Rusia y elimina las transacciones comerciales de los productos que Rusia vende al mundo (bueno, en realidad elimina las exportaciones al mundo occidental, porque China, India y muchos otros países, no van a dejar de comerciar con Rusia). 

Rusia terminará encontrando alternativas al sistema Swift, como ya hizo Irán. Por ejemplo, 

https://www.zerohedge.com/markets/stocks-tied-chinas-swift-alternative-are-soaring

 Pero los europeos no encontraremos los productos que Rusia nos deje de vender, porque no existe alternativa a esa escala. 

En medio de una de las mayores crisis de recursos de la historia, Europa decide pegarse un tiro en los dos pies. Apenas tenemos gas y petróleo y nuestro mayor proveedor es Rusia. Las medidas , aparentemente protegen las transacciones de gas y petróleo, pero las cartas de pago que los bancos de ben emitir para asegurar los intercambios , no se están haciendo porque no existe la confirmación de que mañana estén eliminadas y eso provoca una retracción. No lo notaremos mañana, pero al cabo de unos meses, este movimiento tendrá graves repercusiones de entrega de productos energéticos.

Pero es que además Ucrania y Rusia son los principales productores de trigo. El impacto en la alimentación será dantesco.

https://cincodias.elpais.com/cincodias/2022/02/25/opinion/1645786767_768721.html

 También Rusia produce el 40% del paladio, catalizador imprescindible para los automóviles, junto con partes importantes de aluminio y níquel, cuyos precios ya estaban muy elevados por la escasez de inventarios. Estos movimientos no harán mas que profundizar la escasez de todo, con un efecto indeseable en una inflación desorbitada.

El volumen de exportaciones de Rusia ha crecido sin cesar. En un gráfico antiguo vemos el crecimiento y la importancia de su volumen. La caída del precio del petróleo en 2014 redujo el importe total en dólares, que ahora en 2021 ha vuelto a dispararse.

Ahora tenemos en las noticias, el terrible conflicto en Ucrania a todas horas. El dato de inflación pasará desapercibido y con unas medidas de ayuda (dádivas) que anunciarán más adelante, parecerá que todos los problemas están resueltos, mientras nuestro poder adquisitivo se va por el desagüe. Cuando nos queramos dar cuenta, no llegamos a fin de mes.  

Independientemente de como termine el conflicto, ya estamos sentenciados. A una mala situación, le sucederá otra peor. Antes del ataque ruso, ya estábamos en graves problemas y ahora, vamos a empeorar rápidamente. Pero con un poco de pan y circo, las penas son menos, ¿o no?.   

Saludos.

PD Siempre habrá alguno que pregunte, ¿Qué hacemos si no?. 

Cierto, no hay soluciones fáciles. No hemos acertado en las decisiones pasadas y no lo hacemos en las decisiones presentes, porque no hay solución fácil. En el caso de Rusia, era fácil eliminar la OTAN, pero siempre habrá gente que pensaría que eso era ponerle una alfombra roja , para que reconquistara la antigua Unión Soviética.

 Si las personas que dirigen los destinos de naciones importantes son "malas", no existe solución buena. Si la situación económica mundial nos dirige al decrecimiento, tampoco hay ninguna solución buena. 

Es algo con lo que deberemos convivir a a partir de ahora.